sábado, 27 de agosto de 2011

LA REALIDAD Y EL SUJETO


LA REALIDAD Y EL SUJETO
El proceso de conocer implica saber, obtener información, noticia, dato, acerca de un objeto. Esto significa que el sujeto cognoscente está vinculado con su entorno por lo que constituye la observación que la provee de información.
Los aspectos de la realidad son variados y permiten que el sujeto cognoscente sepa acerca de estructura y comportamiento de los objetos.
La interacción sujeto-objeto genera el proceso cognitivo para que el sujeto  con el objeto de estudio obtenga una representación interna de él.
 El proceso por el que interactúan  un sujeto cognoscente y un objeto podemos establecer que la estructura del conocimiento está conformado por el sujeto cognoscente, el objeto de conocimiento y la interacción  se establece entre ambos.
Los datos de la relación sujeto-objeto permiten que el sujeto haga una representación interna sin necesidad que el objeto esté presente. El conocimiento logrado mediante la relación sujeto-objeto será relevante y significativo. Las representaciones internas en la estructura del conocimiento permiten que el sujeto aprehenda su entorno, estas representaciones pueden ser intelectuales o sensibles.
Los elementos básicos son necesarios para una estructura  o proceso del conocimiento. Podemos establecer que las partes principales son: sujeto, objeto y la relación
Entendemos por sujeto a la persona que desarrolla una labor de investigación en torno a un problema a este problema se le llama objeto. Cuando el sujeto tiene interés en conocer un objeto lo primero que tiene de este es su representación mental o imagen.
El idealismo consta del idealismo subjetivo, lógico, realista y trascendental en torno a la relación sujeto-objeto.
De la interacción entre el sujeto y el  objeto se derivan tres posturas ontológicas del conocimiento que son: la del que conoce, el objeto existe si se relaciona con el sujeto y persistencia del objeto. El sujeto es el centro de la acción de conocer; la segunda postura afirma que el objeto tiene la posibilidad de existir y la tercera afirma que el objeto no existe.
Al investigar, el sujeto reflexiona y  cuestiona en medio de una situación cultural e histórica.    La investigación es una actividad del sujeto, una búsqueda consciente de explicaciones a lo inexplicado.
La posibilidad de conocer la realidad depende de una concepción de la realidad misma. Cuando el objeto es representado tal como es en la conciencia del sujeto, este último tiene un conocimiento  verdadero, una creencia cierta; cuando el sujeto no representa al objeto tal como éste es, el sujeto tiene creencias falsas de ese objeto. La cuestión de cómo puede ser conocido lo real va precedida de otra fundamental: qué es la realidad. Si la realidad en su concreción fuera un complejo de hechos, sería incognoscible. La historia de la filosofía exhibe dos conceptos de manera distinta a la realidad: el realismo y el idealismo.
El realismo afirma la existencia de un mundo de cosas fuera o independientemente de la conciencia o del sujeto y sostiene la existencia de hechos positivos.
El realismo ingenuo es un gnoseológico o cognoscitivo, el realismo se ocupa del modo de conocer la realidad; se distingue un realismo ingenuo.
El realismo crítico advierte   que no puede simplemente   equipararse lo percibido con lo verdaderamente  conocido. Para un realista lo que importa es el conocimiento es lo dado en la sensación;  un realista afirma que las cosas existen fuera de un sujeto e independientemente de él.
El hombre ha ofrecido explicaciones de su realidad mediante un lenguaje sencillo el mito transmite a otros grupos experiencia  humanas y versiones  sobre los acontecimientos  referentes al origen del cosmos y a las primeras fundaciones. Los mitos contienen elementos simbólicos que sugieren lo que se  ha de pensar al enfrentarse  con las grandes  cuestiones en torno al mundo y a la vida, a los dioses y a los hombres.
Para explicar la realidad la experiencia o el contacto con el objeto de estudio es punto de partida para algunas disciplinas.
Ciencia es conocimiento, saber. Las explicaciones científicas es un saber: contrastable o verificable, objetivo, falible, sistemático y racional. La posibilidad de verificar o comprobar un dato empírico nos permite contrastar  la explicación científica con la realidad.
El conocimiento es objetivo porque reproduce intelectualmente a través de explicaciones, teorías y modelos científicos lo real.
El hombre ha desarrollado una manera racional de explicar la realidad: el pensamiento científico. Este tipo de pensamiento ha desencadenado investigaciones científicas. El pensamiento científico ha sido el resultado del desarrollo de la ciencia. Existen distintos niveles de la investigación científica que son: nivel exploratorio, nivel descriptivo y nivel explicativo o teórico.
Una cuestión central de la epistemología es la relación sujeto-objeto. Al ver el conocimiento como un proceso, distinguimos dos elementos: sujeto-objeto. El conocimiento es siempre pensando por alguien en su conciencia. Conocimiento es el proceso por el que interactúan un sujeto cognoscente y un objeto y como resultado se obtienen creencias verdaderas.
Adam Schaff analiza tres posiciones que interpretan el proceso cognoscitivo: la primera posición afirma que el sujeto es más o menos un receptor, la segunda  posición enfatiza el predominio de la actividad del sujeto, la tercera posición afirma que el conocimiento es una relación entre un sujeto y un objeto.
El conocimiento es el puente entre la realidad y la percepción  de la misma. El conocimiento es una habilidad humana en la cual se relaciona un sujeto y un objeto por conocer. El conocimiento no puede ser guardado fuera del ser humano.
Todo conocimiento, y particularmente el conocimiento científico, se  articula a partir del sujeto que conoce, el objeto que se conoce y las categorías.                                                                                El sujeto es el elemento de la acción de conocer que recibe y capta la impresión.                                      El objeto. Sujeto y objeto son etimológicamente dos palabras contrapuestas.                                            Su relación es en el conocimiento. El sujeto que no conoce necesita girar alrededor de su objeto; en el proceso del conocimiento el sujeto se apropia del objeto conocido.
Los modelos  ilustran las distintas  reflexiones  teóricas   sobre el conocimiento y resaltan el sujeto o el objeto según su posición.
El conocer, en su pleno sentido, culmina en el juicio que afirma o niega una proposición objetiva. Antes de especular sobre un objeto es necesario examinar tal objeto. La observación y la descripción del objeto deben anteponerse a cualquier explicación.
El conocimiento al partir del sujeto tiene su origen en tres fuentes: la experiencia es la percepción de los sentidos, la razón permite inferir de unos conceptos enunciados y la intuición definida como la comprensión profunda de algo. Las sensaciones, las percepciones y  las representaciones constituyen el grado sensorial.                                                                               El proceso de la cognición empieza con las sensaciones.
La teoría del conocimiento es el resultado de la investigación acerca de la relación que existe entre el sujeto y el objeto es el estudio sobre la posibilidad, origen y esencia del conocimiento.
El sujeto  del conocimiento es la persona que conoce algo por medio de sus facultades cognoscitivas. El objeto del  conocimiento es el ser o ente que el sujeto. La operación de conocer  o proceso cognoscitivo  consiste en el acto o serie de actos necesarios para que el sujeto se ponga en contacto con el objeto. La representación interna es una reproducción del objeto.

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